miércoles, 27 de octubre de 2010

Los políticos y el velo

¿Tienen los políticos de izquierdas y los políticos de derechas definida su postura en torno al uso del velo en las escuelas -o el burka o el niqab en los espacios públicos-? De los artículos que he leído en la prensa parece desprenderse que los “progresistas” son más tolerantes que los “conservadores”. Sin embargo, hay muchas excepciones por las dos partes; quiero decir que, dentro de las filas progresistas hay bastantes detractores del velo y, al contrario, en las filas conservadoras, bastantes partidarios del mismo. Probablemente las razones que mueven a unos y otros a opinar como lo hacen sean distintas.
Reproduzco, en esta ocasión, una breve entrevista al presidente de la Comunidad de Melilla. Milita, como en ella se dice, en el Partido Popular.
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Obtuvo recientemente el galardón Islán y Convivencia, que otorga la Federación de Musulmanes de España y por eso los que se lo concedieron le animan ahora a apaciguar los ánimos en el conflicto sobre el hiyab (pañuelo islámico). Aunque es del PP, Juan José Imbroda, de 65 años, presidente de Melilla desde hace una década, mantiene sobre el velo una postura tolerante. No en balde la mitad de los 75.000 habitantes de su ciudad son musulmanes.
Pregunta. ¿A favor o en contra del hiyab?
Respuesta. A favor siempre y cuando no sea una imposición a la mujer. Ante todo, la libertad de elegir ponérselo. Por eso creo que no se debería llevar antes de la mayoría de edad. En todo caso no supone una afrenta ni una provocación. Obedece a la tradición, sobre todo en esta zona bereber, y a la religión. En ambos casos es respetable.
P.¿ Después del hiyab, el burka o el niqab que tapan el rostro?
R. No. Estos anulan a la mujer, la convierten en un fantasma. Habría que prohibirlo en lugares públicos. Se podría aprovechar la futura ley de libertad religiosa para prohibirlo.
P. ¿Es usted más tolerante que su partido?
R. El PP no tiene una postura. No he escuchado a Mariano Rajoy pronunciarse. Tenemos un concejal en Gines (Sevilla) que lleva hiyab. En la Península suscita reticencias y hasta asusta. Falta pedagogía.
P. ¿Se ha gestionado bien el hiyab en Pozuelo de Alarcón?
R. Hubo demasiada polémica, lo que ahonda el foso entre unos y otros. Además no creo que la decisión corresponda al instituto o al Consejo Escolar. Un centro no debe poder vetarlo y el otro autorizarlo. Debe tomarse, como mínimo, a nivel de comunidad autónoma.
P. ¿Puede servir Melilla de ejemplo?
R. Sí. Musulmanes, cristianos y judíos vivimos juntos y en paz. El hiyab no supone ningún obstáculo a nuestra convivencia. El 40% de los afiliados al PP son musulmanes. Yo gano las elecciones gracias, en parte, al voto musulmán.
El País, 2 de mayo de 2010.

martes, 26 de octubre de 2010

A favor del uso del velo en la escuela

Sigo reproduciendo noticias y artículos relacionados con el caso Najwa. Os recuerdo que se trata de la musulmana que fue expulsada del centro por llevar el hiyab en la clase. La Consejería de Educación de Madrid le proporcionó otro centro en el que no pusieron impedimentos a llevar la citada prenda.
La noticia tiene como título “Un foro de respaldo reúne firmas”. (El País, 22 de abril de 2010).
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La polémica por el velo de la joven de Pozuelo de Alarcón (Madrid) hierve en la red social Facebook, donde se ha creado un foro monográfico -anoche rozaba los 700 miembros- que recogen firmas para enviar una carta a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Estos internautas quieren conseguir así que Najwa vuelva a su instituto sin necesidad de renunciar a llevar el hiyab (velo islámico). En la carta transmiten a la presidenta Aguirre su “inquietud y malestar” por lo que consideran una vulneración de los derechos de libertad religiosa y educación de la menor.
Aluden a la Constitución, a la Carta Universal de los derechos del hombre, a la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea y a la Convención de los Derechos del Niño. Se preguntan cómo el reglamento de un centro escolar “puede estar en contra” de todas estas normas de rango superior. La propuesta de la Consejería de Educación de ofrecerles otro centro en el municipio, sin reglamento contrario a cubrirse la cabeza, les parece “un parche” que no soluciona “el problema de fondo: la falta de respeto a la diversidad”....

lunes, 18 de octubre de 2010

MUCHAS DUDAS Y ALGUNA SOSPECHA

Es el título de un artículo de opinión que firma Gabriela Cañas, publicado en El País el 30 de abril de 2010. Comenta su autora el caso de la alumna musulmana que fue expulsada del centro en el que estudiaba por llevar el hiyab (velo islámico). Como vais en leer en el resumen, Gabriela Cañas argumenta en contra de su uso en la escuela.

… Este asunto levanta pasiones... La cuestión es que el hiyab informa acerca de la identidad y las creencias religiosas de unas menores. Es una prenda que tiene su origen en los textos sagrados, que aluden a ella como símbolo de sometimiento al varón, y que marca sólo a las niñas (nunca a los niños), especialmente cuando adquieren su plena capacidad reproductiva. ¿Qué hay de malo en ello?, se argumenta. ¿A quién hacen daño esas niñas veladas? En principio, a nadie. Yo tuve que usar velo en misa cuando de pequeña iba a un colegio de monjas. Eso tampoco hacía daño a nadie. Ahora siento que fui sometida a una costumbre de connotaciones religiosas y machistas que considero injusta, además de ridícula e incómoda.
Se alega que se debe garantizar el derecho a la educación de la joven, pero nadie se lo está negando. Sólo se le está pidiendo que, en clase, cumpla las normas como el resto...
La libertad religiosa de Najwa y su familia también está garantizada. O debe estarlo. Nadie les niega el derecho a profesar su credo y a usar el hiyab; salvo que éste lo lleven a clase.
Percibo en todo este debate un cierto sentimiento de culpa hacia otras culturas. Es cierto que nuestro pasado colonialista y nuestro presente xenófobo no son las mejores cartas credenciales, pero nos hemos dotado de leyes y pautas de convivencia que han profundizado en la laicidad del Estado y, sobre todo, en la liberación femenina.
Es chocante tanta timidez a la hora de pedir que en nuestro suelo, se acaten nuestros principios. La igualdad es uno de ellos. Así que resulta difícil explicarle a Najwa que apoyamos la igualdad mientras hacemos excepciones con ella con una prenda que la marca de manera inequívoca y discriminatoria en la escuela pública....
...¿hay que regular el hiyab en las escuelas públicas? ¿Incluso prohibirlo? A lo mejor sí. Pero si, tras una reflexión serena, se decidiera en tal sentido, entonces, con carácter previo, reformemos la Ley de Libertad Religiosa y revisemos el acuerdo con la Santa Sede, profundicemos en la laicidad y pongamos coto a tanta ostentación de símbolos católicos en nuestra vida oficial y pública. Símbolos de una creencia religiosa, por cierto, que como la musulmana favorece tan escandalosamente la discriminación de la mujer. No es de extrañar que hasta la Conferencia Episcopal haya defendido el hiyab.
Por todo ello, frente a la defensa de la total tolerancia al velo, me surgen tantas dudas y me asalta la sospecha.

miércoles, 13 de octubre de 2010

¿Velo?, no

La polémica del velo comenzó en España, si no recuerdo mal, en el año 2002. Sucedió entonces que una alumna fue expulsada de un centro de enseñanza católico por ir el con el velo a clase. Como os podéis imaginar levantó un gran revuelo, similar al que provocó el curso pasado la expulsión de la alumna de un centro público de secundaria por el mismo motivo. Los artículos de opinión a favor y en contra de la medida fueron muy abundantes. En esta ocasión, os reproduzco un resumen de un artículo que con el título de “Tolerancias necias” escribió Javier Marías en el suplemento dominical de El País.

Si en países más dados a razonar se han soltado disparates, era de temer que aquí nos tocara oír y leer necedades sin cuento. Y eso que la disputa ha sido hasta ahora por una cuestión bastante inocente y nimia. No quiero ni pensar cuando empiecen a ocurrir casos más graves, como los ya habidos en Inglaterra, Francia o Alemania. En Inglaterra, por ejemplo, donde hay numerosos inmigrantes de Pakistán y de Bangla Desh, ha sucedido que algún individuo originario de uno u otro lugar haya destrozado con ácido el rostro de una hija, una hermana, una novia o una esposa, siguiendo una práctica al parecer no desusada ni muy condenada en esas naciones asiáticas, en las cuales -espero que sólo entre minorías- se considera delito o pecado o ambas cosas (nada fáciles de distinguir en según qué latitudes), que una mujer se niegue a casarse con quien se le asignó al nacer, o que se relacione con un “infiel” (es decir, un occidental), no digamos que cometa adulterio o algo que se le asemeje en las muy susceptibles mentes o imaginaciones de los dominantes varones.
Pues bien, hasta en Londres ha habido estúpidas y criminaloides voces... Esas voces... venían a sostener que lo que un inglés blanco de pura cepa no podría hacer sin que se le cayera el pelo, un inglés pakistaní o bengalí sí, e impunemente, porque la fechoría en cuestión sería legítima o estaría consentida en sus culturas y países de orígen. Y claro, añadían esas repugnantes voces: hay que respetar la diversidad, y las creencias de cada cual, y sus costumbres, y nosotros no podemos imponer las nuestras sin con ello caer en la intolerancia, el “colonialismo” y, por qué no, el racismo.
Aquí ha bastado el pañuelo de una niña magreví para leer y escuchar toda suerte de majaderías...En uno de los suplementos de este Semanal... he tenido que leer frases como estas: “No estaría mal que nos dieran cursos acelerados por televisión sobre la vida y costumbres de los inmigrantes. Si hemos de vivir juntos, tratemos de que ellos respeten nuestras leyes y costumbres, y nosotros, las suyas”. Es difícil decir más sandeces y barbaridades en tan poco espacio... Pero, ¿qué es esa locura de que nosotros debamos “respetar sus leyes” ¿Sus leyes?... Uno de los fundamentos de cualquier justicia digna del nombre es que la ley sea la misma para todos y obligue a todos por igual... ¿Qué quería decir la señora que soltó estas frases? ¿Tal vez que debíamos respetar que los musulmanes aquí instalados y regidos por el código religioso-penal llamado sharia -el que ha estado a punto de lapidar a una acusada de adulterio en Nigeria, el que corta la mano al ladrón, decapita a homosexuales y no sé cuántas salvajadas más- lo apliquen libremente y sin consecuencias en nuestro territorio, porque al fin y al cabo, oiga, es parte de su cultura y por tanto algo intocable?... No me queda más espacio para proseguir, pero los “tolerantes” demagógicos y criminaloides olvidan, cuando argumentan sus estúpidas atrocidades, que la única ley es la del lugar del destino, y que a ella han de atenerse cuantos se instalen aquí. Y si tenemos la suerte -no siempre fue así- de que nuestras leyes son hoy democráticas, y condenan la discriminación, y no admiten la pena de muerte, ¿qué es lo que quieren esas voces necias, que pongamos excepciones a lo que nos costó no poco y además nos parece bien?...
El Semanal, 28 abril 2oo2

viernes, 1 de octubre de 2010

Curso 2010-2011

“VELO SÍ, VELO NO”.

PRESENTACIÓN

Estimados alumnos: Un nuevo curso, un nuevo tema de debate . Algunos de vosotros ya sabéis de qué va, pues os lo he comunicado en las clases. El tema me lo sugirió un suceso que ocurrió el año pasado en un centro de secundaria, donde una alumna musulmana fue expulsada de dicho centro por llevar el “velo”que cubría su cabeza. No es la primera vez que sucede en España y otros países europeos y, seguramente, no será la última.
Desde que esto sucedió, los medios de comunicación no han dejado de prestarle atención y los artículos y comentarios sobre el uso del velo en las escuelas, tanto a favor como en contra, son muy abundantes. (Os iré reproduciendo algunos de estos artículos de prensa).

Pretendo en esta primera entrada aclarar dos cuestiones. La primera de ellas hace referencia al término “velo”. El velo es una prenda que cubre la cabeza y que las mujeres españolas llevaban , hasta hace no mucho tiempo, cuando iban a la iglesia. El “velo” musulmán, al igual que el español, es una prenda que cubre la cabeza y deja libre la cara. Su nombre es “hiyab”. Por razones prácticas vamos a seguir empleando el término “velo” para referirnos al hiyab.
Hecha esta precisión, paso a lo que más importa que es aclarar el objetivo de este debate. Pese al título, no pretendemos plantear sólo -ni principalmente- si estáis o no de acuerdo con que se permita el uso del velo en las aulas o si, como se ha aprobado en Francia, estáis o no a favor de la prohibición del burka (prenda que oculta completamente el cuerpo de la mujer y cuyas portadoras sólo pueden ver a través de una rejilla de tela) en los espacios públicos.

Con la mayor brevedad posible os expongo los problemas que pueden plantearse :

1.El más directamente relacionado con el título del debate: ¿Cuál es el significado del velo?; ¿es un símbolo religioso?; ¿expresa la inferioridad de la mujer respecto del varón?, ¿es un signo de identidad cultural?; las tres cosas a la vez?. En el primer supuesto, ¿debe permitirse su uso en la escuela pública que por serlo está al margen de cualquier religión?. En el segundo supuesto, ¿debería permitirse su uso en una sociedad democrática que se rige por el principio de igualdad entre los sexos? Y, por último, si no es más que una seña de identidad cultural, ¿no deberíamos practicar la virtud de la tolerancia respetando su uso?

2.Vivimos en un mundo intercultural. A los países más industrializados (Canadá, EEUU, Europa Occidental...) han llegado personas de ámbitos culturales muy distintos al de sus receptores, con valores y creencias distintas, lo que puede plantear graves conflictos de convivencia.
En las sociedades occidentales -y algunas no occidentales- a pesar de su fragmentación en cuanto a las creencias, compartimos unos valores mínimos, los necesarios para hacer posible la convivencia, son los valores contenidos en la Declaración Universal de los Derechos humanos: libertad, igualdad, justicia... Pues bien, estos valores mínimos ¿no podrían ser la base sobre la que se asiente una sociedad mundial? ¿Nuestros códigos morales son tan radicalmente opuestos que el entendimiento entre hombres de diferentes culturas es imposible?. Dicho de otra manera: ¿es posible una ética universal?

3. ¿No hemos llegado a un punto en el que esta aldea global -el planeta tierra- está obligada a entenderse porque de lo contrario no se salva nadie? Y no lo digo en sentido metafórico sino real. Los problemas que tiene la humanidad son de la humanidad : la degradación de la naturaleza, el terrorismo,la superpoblación, la pobreza... a todos, independientemente de su cultura o nivel económico,de una u otra manera nos afectan.

4.Ante la diversidad cultural se han dado diversas respuestas. Desde el punto de vista de política internacional, pienso que hemos llegado a una situación en la que no caben más que dos: o “alianza de civilizaciones” o “choque de civilizaciones”.




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